lunes, 2 de mayo de 2011


Estados Unidos entregó  al Gobierno colombiano 66 piezas precolombinas, incluyendo 16 esmeraldas, que fueron extraídas ilegalmente de la Nación andina y decomisadas en el sur del estado de Florida

Porque no esta en Colombia nuestro Patrimonio cultural?

Hola amigos quiero compartir con ustedes las últimas noticias referente a la no ubicación en Colombia de parte de nuestro patrimonio cultural.

 Colombia busca recuperar cuatro reliquias precolombinas
Una casita de oro, un monolito de San Agustín, un extraño pendiente tallado en esmeralda y un singular lote de orfebrería hacen parte de las joyas que el Gobierno ha detectado fuera del país.
Sin embargo, repatriar una pesada estatua de piedra es tan complicado como 'vender' las bondades del glifosato.
Un tratado sin dientes
"La convención para evitar el tráfico ilícito de bienes culturales, emanada de la Unesco en 1970, tiene muchas restricciones. Por ejemplo, exige denuncias formales de robo. ¿Quién puede presentar una si las piezas fueron obtenidas por guaqueros?", plantea Monika Therrien, subdirectora científica del Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH), la máxima autoridad arqueológica del país.
El esfuerzo colombiano también suele estrellarse con legislaciones más blandas, como la de Europa, donde es lícito comerciar con esta clase de objetos. En algunos casos, como el francés, las reliquias son tan itinerantes que el Gobierno les expide sus propios pasaportes.

Esa permisividad, sumada a los costos legales de presionar una repatriación, que no bajan de 20.000 euros (cerca de 60 millones de pesos), han hecho que el país se concentre en obras excepcionales, como aconseja la Unesco.
¿Cuáles son esos precolombinos que Colombia considera singulares y que hoy permanecen en el exterior? Aquí puede darles un vistazo.
Si echa de menos las 122 piezas de oro del Tesoro Quimbaya, obsequiadas por el presidente (e) conservador Carlos Holguín a la reina española María Cristina de Augsburgo (1891), malas noticias:
"Duele que esté por fuera y nos encantaría tenerlo aquí, pero tenemos que reconocer que salió legalmente del país", sentencia Therrien.
Colección Janssen: 7,7 millones de euros en historia
De qué se trata: Más de 350 piezas de arte precolombino que abarcan 3.000 años de historia americana, de las cuales 141 provienen de Colombia: 127 de oro, tumbaga y otras aleaciones, 8 de cerámica y 6 de piedra.
Paradero: Bélgica. Este país no ha suscrito la Convención de la Unesco sobre tráfico de bienes culturales, por lo cual es considerado como un paraíso para los traficantes de arte. No obstante, estableció criterios para devolver dichos objetos a sus países de origen; por ejemplo, la originalidad, la excepcionalidad y el valor museográfico.

Historia: Dora Janssen, viuda del fundador del laboratorio farmacéutico que lleva su apellido, propuso pagar los derechos de sucesión de la herencia de su esposo con esta colección, iniciada por el matrimonio en los años 60.
A comienzos de octubre pasado, la prensa local informó que el Gobierno de Flandes (una de las tres regiones que componen Bélgica) aceptaría la colección por los 7,7 millones de euros que costaban esos derechos (más de 22.000 millones de pesos).

Con el respaldo del Museo del Oro se hicieron dos peritajes para allegar las pruebas exigidas por Bélgica para devolver las piezas colombianas. El último, realizado en noviembre, concluyó que 14 de ellas son las más significativas, pues no tienen precedentes en las colecciones nacionales.
El concepto fue remitido entonces al Ministerio de Relaciones Exteriores, que tramita la reclamación.

La pieza estrella: Objetos de orfebrería en forma de casa, de la región Calima (Valle), correspondientes al período Yotoco (años 1-800 d.C. aproximadamente). Solo se conocen otros dos en el mundo, que hacen parte de colecciones privadas. Dimensiones: 8,5 cm de alto, 12 de ancho y 20,5 de largo (casa grande).
Las rarezas que Christie's pretendía subastar
De qué se trata: 22 piezas de las culturas Agustiniana, Nariño, Sinú, Tairona, Tolima y, sobre todo, Malagana.
Paradero: Francia (adhirió a la Convención de la Unesco en 1997).
Historia: En diciembre del 2005, gracias a una denuncia de la Embajada de Colombia, las autoridades francesas incautaron este lote, que iba a ser subastado en París por la prestigiosa casa Christie's.
En mayo del año pasado, una antropóloga del ICANH viajó a Europa para hacer el peritaje de las obras. Con base en su concepto técnico, en diciembre se elevó la reclamación por vía diplomática.
La repatriación será difícil, pues una de las condiciones para lograrla es demostrar la fecha y hasta la hora del hurto. Las piezas malagana tienen la mejor opción, porque su yacimiento, situado cerca de Palmira, fue denunciado en su momento como sitio de 'guaquería'.

La pieza estrella: Pendiente tallado en esmeralda, del período Malagana (Valle, años 200 a 400). Se trata de la copia en miniatura de una alcarraza (vasija de barro), algo que no se ha encontrado en ninguna otra cultura del país.
Pequeña antología de un saqueo monumental

De qué se trata: 6 piezas de orfebrería de las culturas Malagana y Sinú.
Paradero: Estados Unidos (suscribió la Convención de la Unesco en 1983).
Historia: La casa de subastas Sotheby's intentó venderlas en Nueva York en mayo del 2006. Aunque la transacción se concretó, la acción del Gobierno colombiano impidió que las piezas fueran entregadas a los oferentes.
Las autoridades estadounidenses le dieron un mes a Colombia para aportar pruebas sobre su pertenencia al patrimonio nacional, requisito que se cumplió. Casi nueve meses después, el Ministerio de Relaciones Exteriores sigue esperando una respuesta definitiva de Sotheby's.
La pieza estrella: Figura de oro, de 3,8 cm de alto y 3 cm de espesor, que representa a una persona con tocado. Pertenece al período Malagana, durante el cual se elaboraron magníficas obras de orfebrería, de las que hay muy pocas en Colombia.
En 1993, unos 3.000 guaqueros invadieron el ingenio azucarero del Valle donde se descubrieron las primeras tumbas de la cultura malagana. Luego del saqueo, muchas piezas salieron ilegalmente del país y se incorporaron a colecciones privadas, por lo cual suelen aparecer en museos y subastas por todo el mundo.

El convidado de piedra
De qué se trata: Una estatua de roca volcánica, hurtada del municipio de San Agustín (Huila) en 1988, y otros 142 objetos del patrimonio arqueológico colombiano, incautados como parte de un lote con cerca de 800 piezas.
Paradero: Dinamarca (adhirió a la Convención de la Unesco en el 2003, pero no la reglamentado).

Historia: El viernes se reabrió el proceso judicial contra el tenedor de estos bienes, incautados en febrero del año pasado en la localidad de Lyngby. Gracias al apoyo de un abogado danés y a la cooperación de Ecuador y Perú, países de origen de las demás piezas, todas ellas han permanecido desde entonces en poder de las autoridades.

La pieza estrella: Estatua de un cacique San Agustín, tallada en piedra. Dimensiones: 76 cm de alto, 48 de ancho y 26 de espesor. Se le había perdido el rastro en 1998, cuando la presión de Colombia impidió que se subastara en Dinamarca, pero la casa encargada de la transacción se negó a revelar el nombre del tenedor.

Los memorandos de entendimiento
Una veintena de piezas Sinú regresó al país en octubre pasado, gracias a un memorando de entendimiento firmado con E.U. el 15 de marzo del 2006.
"Si tenemos en cuenta que 4 de cada 10 obras incautadas durante los últimos 6 años tenían como destino esa nación, se trata de algo histórico", dice Víctor González, del ICANH. De hecho, apenas 8 países han suscrito tratos de este tipo con los gringos.
Según el funcionario, la discusión del TLC creó un clima de negociación que permitió alcanzar el acuerdo.
Colombia les apuesta cada vez más a los documentos bilaterales, debido a la dificultad para cumplir los trámites planteados por los tratados internacionales. La meta ahora es sellar un memorando con Francia, el segundo comprador de esta clase de objetos.

¿Cuántos precolombinos hay en el país?
Como en muchos otros campos, las piezas del patrimonio arqueológico nacional se dividen en dos: las registradas y las no registradas.
Según el archivo del ICANH, las primeras suman más de 84 mil, mientras que los cálculos sobre las ilegales oscilan entre 500 mil y 2 millones. De estas se recuperaron solo 6.312 en los últimos 6 años.
El registro aumentó en forma sustancial entre abril del 2002 y abril del 2003, período de gracia decretado por la administración Pastrana para que las personas dieran cuenta de los objetos precolombinos en su poder, so pena de sufrir su decomiso. Una de cada 5 piezas que hoy tienen registro se regularizó en ese lapso.

La gran mayoría de todo lo registrado (84%) está en poder de 75 instituciones, incluidos museos, casas de cultura y colecciones como la del Icanh, que tiene 13.325 piezas.

El Museo del Oro, con unas 30 mil (más de la tercera parte del total), es el máximo tenedor del país.
Entre los particulares, la tenencia parece más diversa: 191 personas o empresas han registrado uno o más bienes, pero la
suma de todos ellos constituye apenas el 16 por ciento del total.
Sin embargo, de los 13.492 precolombinos en manos privadas, más de 4.000 están en poder de una sola firma: la Galería Cano